En Escocia llegó a haber 3000, los clanes colaboraron. Palacios, castillos pequeños, castillos inmensos, castillos en ruinas y ruinas de castillos. ¡No necesitan verlos todos! Elijan según su ruta. Les propongo 5.
Castillos de Escocia: si hay algo que la mayoría de los viajeros tenemos en mente como plan imprescindible en el país, es visitar al menos un castillo. Aunque tienen más que ver con guerras y un pasado turbulento que con reyes y princesas paseando animadamente, es parte de la imagen romantizada que tenemos de Escocia. La realidad es que tienen un encanto especial.
A algunos, sólo por sus ubicaciones espectaculares vale la pena acercarse (aunque no entren); otros justifican absolutamente la hora –promedio– que ocupa la visita.
Les contaré sobre los que visité en mi camino hacia las Tierras Altas; desde Edimburgo a la isla de Skye: en bosques, en islotes, a orillas de un lago o sobre una colina.
CASTILLOS DE ESCOCIA
Los castillos medievales de Escocia pertenecían a clanes (especialmente), a nobles y a reyes. Tras Culloden, la batalla que cambió la historia del país, muchos fueron destruidos, abandonados o tomados por los ingleses.
La ciudad de Linlithgow, a menos de una hora en auto y 20 minutos en tren desde Edimburgo, es clave para turistas de la capital. Luego, las Tierras Altas ofrecen los más impresionantes y fotogénicos.
CASTILLOS DE ESCOCIA: EDIMBURGO Y CERCANÍAS
1) DOUNE CASTLE: EN EL BOSQUE
Fortaleza del 1300, castillo de nobles (duque de Albany) y residencia del «rey sin corona»: Doune Castle. Abandonado, sus ruinas fueron restauradas en la década de 1880. Hoy pertenece al Estado. Tiene muy buenos espacios internos para conocer y está excelentemente mantenido; que sea famoso ayuda.
Doune Castle (se pronuncia como ‘doon’) se ha acostumbrado a recibir equipos de filmación desde los años 70.
Para los fans, es un must de «Escocia Outlander»: Leoch Castle.
Existen tours para seguidores de la serie que lo incluyen entre sus atracciones. En la audioguía participa Sam Heughan contando, entre otras cosas, cómo aprender a hablar gaélico.
Los interiores, por protección y adaptabilidad, se usaron poco. Fueron los terrenos de los alrededores y el patio desde donde se obtuvieron escenas que reconocerán. Más Escocia Outlander aquí.
DÓNDE. En el pueblo de Doune. A 70 km de Edimburgo y 13 km de Stirling.
¿Cómo ir a Doune Castle desde Edimburgo?
En transporte público: hasta Stirling (bus o tren) y luego autobus 59. Si van en auto (una hora aprox.), hay estacionamiento (pago).
- CERCA. Destilería Deanstone, antigua fábrica de algodón. Visita finaliza con degustación de whisky.
2) BLACKNESS CASTLE: SOBRE UN FIORDO
Entre Glasgow y Edimburgo, una fortaleza con forma de barco en lo que era el puerto del Linlithgow. Sobre el fiordo del río Forth (desemboca en el Mar del Norte), Blackness Castle fue construida en el 1400 como residencia para una de las familias más poderosas de Escocia. Al poco tiempo pasó a la Corona. Pertenece al Estado y después de la I Guerra se convirtió en atracción turística.
DÓNDE. En Linlithgow, a unos 30 km de Edimburgo y 50 km de Glasgow.
¿Cómo llegar a Blackness Castle?
Hasta Linlithgow en tren (desde Edimburgo o Glasgow, 20-30 minutos) + bus. En auto, estacionamiento gratuito.
- CERCA. El palacio Hopetoun House (privado, visitable), ejemplo de arquitectura de la nobleza escocesa, lugar de nacimiento de María Estuardo y locación para los Sassenachs.
3) CASTILLO DE EDIMBURGO
En el centro, literal, de la ciudad vieja de Edimburgo; desde donde creció la ciudad. Sobre un peñasco volcánico que estratégicamente le sirvió como defensa natural y lo convirtió en fortaleza desde la Alta Edad Media.
Nunca fue fácil tomar el castillo… hasta 1933 cuando se abrió al turismo. Pese a haber sido diseñado para no dejar pasar a nadie hoy día es la atracción más famosa de Edimburgo.
RESIDENCIA REAL. Los monarcas escoceses medievales tenían más de una residencia –en distintos lugares (Edimburgo, Stirling, Falkland y Linlithgow)– y se trasladaban entre ellas con frecuencia con toda la corte y servidumbre. El castillo de Edimburgo funcionó como tal por unos 500 años –y no fue del gusto de todos–; los primeros reyes en usarlo: Malcom III y Margarita (luego santa) en el siglo XI.
Desde mediados del 1500, fue reemplazado como residencia Real –más cómodo, ¡con agua!– por el cercano Palacio de Holyrood y su uso se redujo a lo militar.
El hijo de María Estuardo –Queen of Scottish–, Carlos Eduardo «Bonnie» Prince nació en esta fortaleza; la habitación donde dio a luz se puede ver limitadamente.
LA LEYENDA
Según una leyenda de 1093, en el castillo de Edimburgo los pictos –tribus celtas escocesas– tenían cautivas a jóvenes vírgenes. De ahí el antiguo nombre «Castillo de las doncellas»
DÓNDE: en el centro de la Old Town.
VISITA. Convertido en museo castrense, encontrarán buenas panorámicas de la capital, cañones, arsenal, tesoro escocés, prisión, etc. El castillo de Edimburgo, importante en la historia escocesa durante 1000 años, es visible –y precioso en sus exteriores– desde casi cualquier lugar del centro y fácil de visitar para el turista de la capital por su ubicación.
- MÁS: Holyrood Palace (a poca distancia, hogar de la realeza escocesa y residencia oficial de Isabel II) y Craigmillar Castle.
CASTILLOS DE ESCOCIA: TIERRAS ALTAS
1) EILEAN DONAN CASTLE: EN UNA ISLA
Romántico cubierto de niebla o bajo un cielo azul, en el punto de encuentro de tres lagos –Loch Long, Loch Luich y Loch Alsh–, Eilean Donan Castle, en su momento, fue una fortaleza con magníficas defensas. Aunque lo veamos vulnerable y solitario en su propio islote rocoso, sólo se accedía por agua o por un puente delgado como el que usamos hoy.
Eilean Donan pertenece al clan MacRae. En el siglo XX sus integrantes lo recuperaron y lo restauraron como en sus tiempos dorados, 200 años después de la prohibición de la cultura highlander, incluidos los clanes.
Mantenimiento estupendo con su mobiliario y decoración. Presten atención al tartán de los MacRae presente en cojines, edredones, cortinas y ropa.
DÓNDE. Sobre la ruta que los lleva a la isla de Skye, justo antes de cruzar a esta bellísima tierra remota de las Highlands.
CUESTIÓN DE CLANES. En la puerta principal (imagen 2) hay una curiosa advertencia en gaélico: «Mientras haya un MacRae adentro, no habrá un MacKenzie afuera».
2) URQUHART CASTLE: BUSCANDO A NESSIE
Sobre una colina en la costa del Loch Ness, disfrutarán de vistas espectaculares (en un día sin nubes ni lluvia…) desde las ruinas del Urquhart Castle; el castillo medieval más grande y uno de los más visitados de las Tierras Altas.
Cerca de Inverness, es la excursión clásica de la zona y de los «cazadores de Nessie». Llegan por agua en crucero o por tierra con un tour o en auto.
La fortaleza cumplió un papel importante en la lucha entre escoceses e ingleses. En cinco siglos pasó de unos a otros: nobles, clanes, gobierno. Lo destruyeron y reconstruyeron muchas veces.
Fue abandonado en 1692, pero antes lo hicieron explotar para que los jacobitas no pudieran usarlo. Nunca se reparó.
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