"No estoy bien, no sé si sirve de algo pero quiero decirlo", así empezaba un tweet que el actor Alejandro Sanz ha publicado en sus redes sociales, a modo de desahogo. Desde la distancia, las vidas de los actores o cantantes famosos, en general, personas mediáticas con carreras asombrosas, parecen ser luces de color.
Pero la realidad es que lo que nos iguala y nos baja al mismo nivel de la tierra o del cielo es el dolor y el amor. Sobre todo el dolor, todo el mundo, por más dinero, reconocimiento, trabajo e incluso amor que tenga en su vida, no se libra de pasarlo mal.
El cantante ha publicado un tweet de madrugada donde decía lo siguiente:
"No estoy bien. No sé si esto sirve de algo pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado. Por si alguien más cree que hay que ser siempre una brisa de mar o un fuego artificial en una noche de verano. Estoy trabajando para que se me pase… llegaré a los escenarios y algo dentro me dirá qué hacer. Pero a veces no quiero ni estar. Literalmente. Sólo por ser sincero. Por no entrar al ruido inútil. Sé que hay gente que se siente así. Si te sirve, yo me siento igual", comentaba en la red social.
Es importante que personas que, aparentemente, tienen todo el éxito del mundo, digan esa última frase después de hacer un ejercicio de exposición de su vulnerabilidad y su sufrimiento. También dejar escrito la importancia de trabajar y de pedir ayuda cuando lo necesita pero, sobre todo, aquello de: "Sé que hay gente que se siente así. Si te sirve, yo me siento igual", esto es un canto de empatía y de esperanza para el que sufre. Sobre todo, una visibilización necesaria de la salud mental.
Todo nuestro cariño desde aquí, Alejandro.
