Una historia personal de amor y redención, en la que Johnny Rez amplifica el mensaje principal con la compañía de Daniel Calveti.

«Dios ha sido muy bueno conmigo. Me sacó de una vida de drogas a una vida de música y propósito. Sus promesas para mi presente y futuro siguen cumpliéndose y veo su mano en todo tiempo. Él ha abierto y cerrado puertas en el momento correcto, y todo ha sido un acto de su bondad», expresa el artista.

Fundamentada en la cita bíblica de Jeremías 29:11, el solista recuerda haber resonado una genuina oración en su corazón; «Tómame de la mano, enséñame lo que has preparado». «En ese instante, quería tener la seguridad de que iba por el camino que Dios tenía para mí. Me aferré a esta palabra, misma que representa perfectamente la bondad de nuestro padre, que nos sostiene y nos protege».

Producida por Abe Osorio, la musicalización está conformada por elementos y efectos retro, así como por una cálida base de cuerdas percutidas que se complementan con arreglos de percusión.

Por otro lado, la unidad en el ambiente musical y comunidad cristiana ha sido evidente. Prueba de ello es la hermandad que ha surgido entre el intérprete y el cantante venezolano, Daniel Calveti, la cual les dio la oportunidad de unir sus voces a la visión del tema.

«Siempre he admirado a Daniel por ser un hombre humilde, amable y lleno de sabiduría. Lo conocí en un campamento de grabación y composición de Maverick City Music, y desde entonces, nos hicimos amigos», expresó Johnny.

Con la participación de ambos artistas, el rodaje del video musical se llevó a cabo en una iglesia ubicada en la ciudad de Dallas, Texas. Con un estilo rústico y un ambiente acogedor, la producción fue liderada por el director Eli Acuña, quien ha trabajado en múltiples proyectos audiovisuales de la industria.

Adicional a su desenvolvimiento en el arte de la música, Johnny ha mostrado una fuerte pasión por las misiones.

Su último viaje a Bogotá, Colombia, le permitió realizar un taller deportivo de tres días, así como visitar y evangelizar en una base militar nacional, tres escuelas públicas, dos iglesias, entre otros lugares.

Con este llamado en particular, Johnny continuará compartiendo el amor de Dios a cada persona que lo necesite, por lo que la próxima semana estará emprendiendo un viaje misional a Cuba.

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