Unas 9.000 personas se entregaron ayer a los acordes de la rumba 'canalla' de los hermanos de Cornellà. Foto: PERE BOTA

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NICO BRUTTI

Volvieron los Estopa. Cada vez más sorprendentes. En esta ocasión con una escenografía muy urbana, custodiada lateralmente por pantallas gigantes, y su correspondiente señalización vial. Diez minutos después de la hora prevista, la banda hacía acto de presencia sobre el escenario. Entrada estelar de los hermanos de Cornellà, que con un juego de sombras y a ritmo de batería, se entregan al público con Cuando amanece.

Este cronista recuerda aquella lejana actuación en el Sitjar y la más reciente, en el Coliseo Balear, de hace dos o tres veranos. Y ya la diferencia era notoria en cuanto a sonido, luces, efectos, escenografía entre un concierto y otro.

El Palma Arena se llenó anoche -hasta 8.500 entradas vendidas horas antes de la actuación- en el regreso a la Isla de los Estopa, en un concierto con el que se calculará el aforo real del recinto.

Anoche estos dos canallas, que nunca imaginaron en la noche remota de su Cornellà natal, en el bar La Española de San Idelfonso, que estarían rodando en otra gira, llegaron para presentar su último trabajo discográfico, Allenrok. Su título es el reflejo del lugar de pertenencia de los hermanos Muñoz, ya que no es más que el nombre de su ciudad, Cornellà, escrito al revés y con K. Además, es el primer álbum producido por los Estopa.

Publicado el 26 de febrero de 2008, el disco representa 12 estados de ánimos, destacándose el single Cuando amanece, una canción que mucha gente relaciona con Tu calorro del primer disco. En esta canción y en El run run ha colaborado Chonchi Heredia -que también colaboró en Tu calorro y en El del medio de los Chichos-. En el disco también colaboran Juan Maya, Angie Bao, José Antonio Romero, Luis Dulzaides y Nacho Lesko. La gente bailó como nunca, cantó hasta la afonía y despidió a los Estopa a lo grande. No merecía menos.